A nivel general
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Se han conjuntado personas y organizaciones preocupadas por la formación de la ética social y por la conformación de un buen gobierno.
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Se han abierto espacios para la participación ciudadana en las decisiones éticas de sus gobernantes.
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Se ha motivado a los nuevos gobernantes en los temas de las decisiones éticas y por la práctica del bien común.
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Técnicamente se han hecho presente en la sociedad mexicana y en el gobierno en turno los avances que en ética política, negociación y resolución de conflictos han aportado los especialistas internacionales.
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Se han iniciado los procesos para la conformación de una sociedad más comprometida que vea en los valores éticos un sustento para las decisiones políticas.
A nivel particular:
- Los cursos, seminarios y encuentros; han resultado ser un vehículo muy eficaz para la promoción de los valores éticos aplicados al buen gobierno. Sin embargo, hace falta abarcar mayores grupos y mayores zonas geográficas.
- Las publicaciones de apoyo han abierto muchos caminos (en ocasiones inéditos para México), en la preparación ciudadana y en la preparación de las y los gobernantes. Hace falta el poder ofrecer nuevos títulos y promocionar los ya existentes.
La publicación Civilitas obtuvo gran penetración e influencia entre los sectores de toma de decisiones y se consolida como un instrumento “tronco” para la promoción de proyectos a favor de la Ética Civil y Buen Gobierno. Al ser limitada su difusión, no fue posible llegar a todos los Estados de la república por falta de recursos.